Después me acercaba mucho a su rostro (siempre fui muy mimoso y cargoso, así que era normal) de manera que nuestros labios casi se junten y le preguntaba "te puedo dar un beso??" y tal vez pensando que no lo iba a hacer me respondía "sí" pero yo no lo hacia, solo le besaba la mejilla.
La historia comienza cuando estudiaba secundaria siempre fui muy asediada por los chicos pero la verdad es que a mí no me llamaban la atención para nada eran muy tontos, siempre estaba sola en todo momento ni siquiera con las chicas me gustaba estar solo me ponía a leer cualquier cosa mi rutina diaria era de la escuela ala casa y así diario era mi vida muy aburrida.
Una señora casada con dos hijos mayores es expulsada de casa por su familia descubrirla en flagrante adulterio. Se dedica al porno y envía sus películas a sus familiares.
Mientras la penetraba Luis la susurraba al oído que iba a acabar de un momento a otro, sus manos recorrían los pechos de Sara, su cintura, su cara, sus dedos se introducían en su boca, recorrían su rostro, mientras los dos se esforzaban por ahogar sus gemidos, para evitar así ser oídos.