Esclavizándome
Me llamo Eva, llevo 9 años de casada y jamás había tenido en la cama a otro hombre que no fuera el que es hoy mi marido.
Antes de casarme habia tonteado con otros, pero nunca paso de magreo por aquí y toqueteo por allá, pero lo que se dice acostarme no me habia acostado mas que con mi adorado marido.
Me case con 24 años, ahora con mis 33 aun estoy aun de muy buen ver, ya que procuro mantenerme en forma, tengo el cuerpo con curvas gracias a mis pronunciadas y puntiagudas tetas y mi culo respingón con un tamaño proporcionado a mi cuerpo delgado
Mis piernas largas y duras, mi pelo castaño, ojos marrones… mi marido dice que tengo cara de niña buena y suelen decirme que me parezco a Inés Sastre.
Bien mi marido, siempre a buscado complacerme y hacerme feliz a todos los niveles pero más si cabe en el aspecto sexual.
Ya siendo novios me dejo perpleja cuando me dijo que no le importaba si me acostaba con un amigo siempre y cuando se lo dijera a el antes y le contara que tal le había ido.
Como estaba locamente enamorada de el y lo sigo estando me negué en rotundo incluso llegando a molestarme bastante su propuesta.
Pero esa propuesta se transformo en una de mis fantasías más obsesivas y utilizadas en varias sesiones de «sexo individual», dejándome llevar e imaginándome haciendo el amor con amigos nuestros y después contándoselo a el , valorando el polvo, explicándole lo que me hizo uno, lo que me hizo otro.
Como tenia mucha confianza en el se lo conté y pareció no darle mucha importancia, pero mas tarde me di cuenta que tomo buena nota del asunto…
Pasado un tiempo, haciendo el amor, empezamos a «jugar» como si fuéramos otras personas. A veces el era ladrón y yo la dueña de la casa, otras veces era una delincuente que había sido pillada infraganti robando y tenia que pagar por ello, a veces el maestro y la alumna y otras simplemente yo era una puta y el el cliente exigente.
Este juego nos permitía utilizar un vocabulario y unas maneras muy distintas, pudiéndonos insultar humillar sin por eso molestarnos. Siempre el tomaba el mando, cosa que a mí me encantaba y entraba en el juego haciendo de puta, sumisa, ladrona, de alumna…
Casi siempre me tapaba los ojos para que me metiera mas en el «ajo» y pudiera jugar con la imaginación. Me ordenaba que me tumbase, por supuesto desnuda y el de pie a mí alrededor recorría mi cuerpo, soltando comentarios tipo » buen culo tiene la puta esta» » SEPARATE LAS NALGAS», simulando como si fueran varias manos las que me tocaban, varias bocas la que me lamían, unos eran caricias otros sobeteos bastos, otros me palpaban el sexo, otros trataban de meter un dedo en mi vagina.
Mientras seguía soltando, cambiando la voz, «esta guarra esta encharcada, hay que follársela… o «mirad que coño tiene…» me obligaba a mantener mis manos pegadas a mis nalgas separándolas o me obligaba a separar las piernas…
Al final siempre acababa follándome como el solo sabia, a veces a mitad del polvo se paraba, se levantaba y hacia como si fuera otro el que me iba a empezar a follar cambiado de postura y tocándome como reconociendo un nuevo cuerpo.
A veces sin mas acercaba su miembro a mi boca, obligándome a lamérsela, yo seguía con mis ojos tapados, no dudaba en correrse dentro de mi boca, la verdad que me excitaba muchísimo el simple echo de pensar que me estaban follando varios, que varios me miraban, me sobaban, al final acababa siempre quitándome el vendaje de los ojos y besándome .
Todo esto se convirtió en un juego habitual incluso yendo a mas ya que no se limito a ordenarme que no moviera las manos si no que ya me ataba, pero a mí me seguía gustando.
Un día de verano me ordeno que fuera a mi peluquería habitual y me depilara íntegramente el sexo, me negué. Me dijo: «tu misma pero si quieres sexo tendrás que obedecerme». Me dejo sin sexo durante tres semanas lo echaba de menos y siempre que me acercaba me hacia la pregunta»: ¿Cómo tienes el coño?». Hasta el día que acepte y me fui a mi peluquería habitual.
«¿ TODO? me pregunto, la chica » sí TODO»
Me sentía ridícula, miraba hacia abajo y veía mi raja desnuda, mis labios marcando la entrada a mi vagina… Nada mas llegar a casa se lo hice saber, me dio un beso y me dijo : «no te vas arrepentir, quiero que esta tarde salgas y vuelvas a las 16.00 llevando esto que esta en la bolsa y nada mas que esto y no quiero que lo abras hasta el momento que te cambies en el coche metida en el garaje.
«De acuerdo cariño» A las dos me marche de casa, estaba nerviosísima y daba vueltas metida en el coche hasta las 16. 15 que metí el coche en el garaje de la urbanización y por fin abrí la bolsa,
Había un papel que leí:
Coge y ponte el camisón: era un camisón completamente transparente y muy corto, me llegaba a tapar justo las nalgas, no debes de llevar nada mas que eso puesto y en tu mano derecha el «tapaojos» y en la izquierda el regalo que abrirás arriba en casa, era una caja de cartón alta como la de una colonia.
Una vez llegues a la puerta cerrada del dormitorio antes de entrar abrirás tu regalo, te pondrás el «tapaojos» entraras y obedecerás.
Salí del coche descalza y prácticamente desnuda, solo con el mini camisón, que no tapaba nada, corrí hasta el ascensor que afortunadamente estaba en la planta y no lejos del coche.
La puerta de casa estaba abierta, entre, no estaba el, había un silencio casi asustadizo, llegue ante la puerta del dormitorio, abrí el «regalo» y ¡SORPRESA! Un vibrador enorme de goma en forma de un gigante y grueso pollón , sonreí, pero no me imaginaba con semejante juguete dentro de mi. Me coloque el «tapaojos» y entre.
«Hola preciosa, ¿ que te ha parecido tu primera sorpresa ? Se refería al enorme juguete: «bien amo me ha encantado, conteste entrando como siempre en el juego.
» Bueno hoy vas a quedar saciada del todo, ya lo veras no te faltara nada, pero tendrás que confiar en mi.»
«Amo sabes que confío plenamente en ti» «bien pues puedes empezar»:
Acércate, súbete de pie encima de la cama, acaríciate los senos acaríciate y deja caer con sensualidad el camisón» Me subí tal y como me ordeno y simulando un baile de streptease contoneando caderas acariciándome ingle, senos, culos, acabe soltando los dos hilos que sujetaban el camisón y quede totalmente desnuda, con mi sexo totalmente depilado.
» Vaya vaya, vaya, muy bien ahora túmbate, separa las piernas quiero que te toques, que te masturbes y que juegues con tu juguete nuevo.» No entendía muy bien el juego pero seguía las ordenes a rajatabla y comencé a masturbarme.
Empecé a separar mis piernas y a tocarme, note que la simple excitación por el echo de «que me hará» o «que habrá maquinado esta vez» me había excitado de manera que tenia el coño empapado, de repente me dijo: «sigue masturbándote, guarra que te veamos todos» eso hice, después me obligo a ponerme a cuatro patas, a separar mis nalgas, a meterme el dedo en la vagina y al comienzo del ano, estaba excitada y movía mi cuerpo caliente apretaba mis senos, pero no era suficiente. » Te quieres meter ya el juguete, o prefieres que lo hagamos nosotros». El echo de que hablase en plural me excitaba mas era como imaginando que me estaba masturbando ante mirones.
En un silencio escuche como el ruido de un motor, al no tener las manos vendadas me fui a quitar el «tapaojos», pero rápidamente me lo impidió y recrimino. » ¿Qué estas haciendo, que suena? le pregunte nerviosa » Es un video que te estoy haciendo»… me enfade y le dije que no lo hiciera que si me tenia siempre a su disposición que para que quería grabarme.
Muy tranquilo siguió grabando y me dijo : ¡ Cállate! Veo que no confías en mi, si quieres lo dejamos y si decides seguir es con todas las consecuencias, sabes que no haré uso del video, pero te esperan grandes sorpresas y estoy seguro que te encantaran recordarlas»… no sabia que hacer, se me acerco me abrazo, necesitaba ese contacto, ya podía hacer lo que quisiera conmigo. Tras un largo silencio dije: «estoy a tu entera disposición Amo y haré lo que me pidas, TE QUIERO » y yo a ti putita, pero ahora vamos a seguir jugando».
«Me he quedado un poco fría… » Tranquila que nosotros te recalentamos…» «Ponte de pie» , eso hice, con unas plumas empezó a juguetear con mis pezones, después bajo por el interior de mis muslos, me hizo separar las piernas, recordaba mi raja depilada, jugo con mis labios vaginales, sentía cosquillas, de repente note un pene, rozando mis nalgas, me asuste ya que la voz de mi marido parecía haber salido por el lado opuesto y además era un pene mas grande y largo que el de el pero pensé en el «juguete».
De repente se marcho y se se coloco de frente a mi empezó a rozar mis labios vaginales que para entonces ya estaban empapados, estaba mas erecto.
«¿Que te parece la polla de Eduardo?» Eduardo era un amigo suyo de infancia, soltero y golfo donde los haya, este vivía en Sevilla y además hacia mucho que no sabia nada de el, por lo que pensé que seguía poniéndome a prueba para que me quitase el pañuelo de los ojos.
Decidí seguirle el juego: » Me gusta AMO». » Si es así, arrodíllate y comételo, pero sacando la lengua, chapándole los huevos, como una gran puta» Me arrodille, seguía mosqueada porque la voz parecía estar mas alejada, pero… tampoco me podía imaginar otra cosa… me coloque la boca a la altura del gran rabo y al tocarlo definitivamente me di cuenta que esa polla no era la de mi marido, cuando fui a reaccionar, la persona ( quien sabe si Eduardo) me cogió la cabeza y me clavo su miembro entero en la boca, fue cuestión de segundos, sentí una boca en mi seno derecho, una mano pequeña como la de una mujer acariciándome mi otro seno y las manos inconfundibles y expertas de mi marido en mi excitadísima y encharcada raja, jugando únicamente el sabe con mi Clítoris.
Tuve que seguir ya se que parece increíble, pero ya no había marcha atrás. Me manipularon como una autentica muñeca hinchable.
Lamí ambas pollas, me introdujeron ambas por ambos agujeros, mientras lamía lo que era el coño de la chica, o mujer, o vete tu a saber. La sensación de que hubiera por medio una mujer era aun mas morbosa, excitante, innovadora…. vamos que goce lamiendo la raja de esa mujer, que dicho de paso tenia también totalmente depilada.
Tras varios orgasmos seguidos tener el coño y ano escocidos, mis «torturadores» decidieron acabar con la farsa. Me hicieron ponerme de pie y el tal Eduardo hablo:
«Muy bien esclava, acabas de ganar 50.000 pts.» » ¿ que te ha parecido? «, no sabia que contestar , » BIEN, MUY BIEN…»
Se rieron y hablo ella, «¿Tienes ganas de ver la cara de tus amos?»
«SI » conteste tragando saliva…
Pues las veras en la próxima sesión , pero ya será una sesión menos familiar 🤣
Se fueron mi marido se me acerco y me dijo, quédate aquí mientras despido a nuestros invitados.
Fue oírles salir de la habitación y me quite el vendaje, la cama estaba desecha, la cámara de video abierta, osea se habían llevado la cinta y 300 euros encima de la mesilla.
Entro mi marido. » hemos quedado el sábado, cariño» . dijo nada mas verme. » ¿he? esto… vale, digo, vale cariño y, gracias por tu sorpresa.
» De nada mi amor y ahora vámonos a gastar esa pasta en una buena cenorra»
Se me acerco me beso y me demostró que le y que me, quería mas de lo que pensábamos.
Nunca quise contar esta historia hasta que me decidí a contársela a mi amiga Rosa y me sugirió que lo hiciera por escrito, por eso mi email esta dedicado a ella. Además de comentarios evidentemente he comentado a mi marido que lo iba a hacer y me ha pedido que comentara que no dudéis en proponer «pruebas» que demuestren mi total sumisión hacia el.