Vacaciones sexuales

Era temprano cuando llamaron a la puerta, yo estaba durmiendo ya que era fiesta y tenía un puente muy largo por delante, me puse una batita de seda transparente encima de mi cuerpo desnudo, ya que me encanta dormir totalmente desnuda, y fui a mirar quien llamaba a esas horas.

Mire por la mirilla y era mi amigo, así que le abrí la puerta, porque como dije en mi relato de fantasías no me importaba que me viera desnuda.

Al entrar sonrió y me dijo que para ser tan temprano estaba muy sexy, yo le sonreí y le pregunté qué es lo que quería a esas horas de la mañana.

Me dijo que había conseguido una casa cerca de la playa, yo recordé que hace algún tiempo habíamos visto una casita en la playa que tenia piscina y que habíamos comentado cuánto nos gustaría pasar unos días allí, pero era casi imposible pues el dueño era un médico y aunque lo conocíamos no habíamos hablado nunca con él.

El caso es que mi amigo me dijo que teníamos que irnos ya, que cogiera cuatro cositas porque nos estaban esperando.

Le hice caso y nos fuimos a mi cuarto para hacer la maleta, no sabia que llevar y como todavía estaba medio dormida le dije que me hiciera él la maleta que yo me iba a dar una ducha.

Cuando salí de la ducha ya lo tenía todo preparado, como sabia que me gustaba vestir sexy aunque fuéramos a la playa me había dejado encima de la cama un pantaloncito corto y ajustado de color blanco, un tanguita negro, un top bastante ajustado que normalmente llevaba con un sujetador de los que realzan los pechos y unas sandalias de tacón alto que tenían solo dos tiras muy finas.

Me vestí y salí de la habitación, me estaba esperando viendo una peli porno que estaba en el video y que yo había visto por la noche, me miró de arriba abajo y me dijo que estaba muy sexy, y que porque teníamos prisa sino me follaria allí mismo, estaba bastante excitado ya que la peli era bastante buena y de la que nos gustan a él y a mi, varios hombres follado con una mujer.

Bajábamos en el ascensor y aproveche para frotarme contra su polla, en ese momento el ascensor se paro y entro mi vecino del quinto, siempre me miraba con ojos de deseo y ese día no iba a ser menos pues con la ropa que llevaba era para que me mirase, nos saludo y entro.

El ascensor no es muy grande y yo me puse entre los dos de espaldas a mi amigo y de cara a mi vecino, seguí con lo que estaba haciendo, es decir frotándome con él, veía como mi vecino nos miraba de reojo y como su respiración se aceleraba.

Entonces deje caer mi pulsera y me agache a recogerla, mi culo rozaba contra la entrepierna de mi vecino y note como estaba dura, me levanté y dije ¿parece que hace calor aquí no?, mi vecino asintió sin quitar sus ojos de mi escote, yo mire hacia abajo y vi como uno de mis pechos se había salido casi del todo al agacharme, metí mi mano por el escote y coloque mi pecho en su sitio.

Cuando llegamos abajo mi vecino ya estaba totalmente excitado, nos despedimos de él que dijo que se le había olvidado no se que y volvió a subir.

Cuando se fue mi amigo se echó a reír y dijo lo que le pasa es que necesita una ducha fría, mira que eres le has puesto cardiaco un dia te va a pillar en el ascensor y no te va a dejar salir hasta que le alivies.

Montamos en el coche y comenzamos nuestras pequeñas vacaciones, mi amigo me dijo que le había puesto caliente la peli y encima voy yo y le pongo más en el ascensor, yo le dije que no había problema que si queria le podia aliviar de camino a la playa.

Y eso fue lo que hice nada más salir me metí entre sus piernas, le saque su polla fuera del pantalón y empecé a chupársela, mientras hacia esto se puso a nuestro lado un camión y claro desde allí arriba veía todo y aun encima yo tenía mi culito bien a la vista porque me había puesto de rodillas en el asiento, para que os hagáis una idea se me debía de ver casi todo mi coñito ya que el pantaloncito se me metió entre mis piernas, no se que tal le iria mirando y conduciendo a la vez.

El caso es que después de que mi amigo se corriera en mi boca, paramos a tomar algo en un restaurante de carretera, yo me fui al servicio y ni me di cuenta de que alguien me seguía, entró detrás de mí y pensé que seria otra mujer, pero nada más entrar noté como cerraba la puerta con pestillo y me di la vuelta, nada más darme la vuelta me encontré con un hombre bastante fornido, no sabia que es lo que quería hasta que me dijo, porque no me la chupas a mi igual que se la chupabas a ese tio, yo ya sabía a qué se refería pues mi amigo me había contado que mientras se la chupaba un camionero se puso a nuestro lado y no nos quitó la vista de encima ni un momento.

Yo que ya estaba bastante caliente asi que saque su polla de los pantalones y comencé a chupársela, estuve asi un rato hasta que me levante y le dije que yo también estaba caliente y necesitaba aliviarme, el camionero no se lo pensó dos veces y comenzó a manosearme por todo mi cuerpo, me bajo mi pantaloncito y empezó a pasar su lengua por mi coño y mi culito que para entonces ya estaban muy húmedos.

Me sentó en el lavabo y metió su polla en mi coño, cuando la sentí entrar gemi de placer pues deseaba que me penetrara hasta el fondo, la metió y saco varias veces rápidamente y eso me hacia gemir de placer hasta que me corrí, el saco su polla de dentro de mi coño y me la puso delante de la boca para que se la chupara, se la estuve chupando hasta que se corrió y su leche empapo mi cara.

Me lave un poco y salí del servicio, mi amigo estaba en la barra hablando por el móvil y al llegar yo solo le oí decir que llegaríamos en un par de horas.

Le pregunte que con quien hablaba y me dijo que con la persona que nos había dejado la casa, yo que ya estaba más despierta le pregunté que cómo había conseguido que nos dejaran esa casa, el me contesto que siempre se puede conseguir casi todo sobre todo negociando con ciertas cosas, y no me quiso decir más.

Después de dos horas de viaje por fin llegamos a la casa, nos abrió la puerta un chico joven de unos 20 años y nos dijo que pasaramos al salón, el chico no me quito la vista de encima ni un momento, cuando mire de reojo estaba detrás de mí mirándome el culo.

Al rato vino un señor de unos 40 años bastante apuesto, mi amigo nos presentó, aunque yo ya lo conocía, era el dueño de la casa, nunca había hablado con él pero teníamos amigos comunes, me dio dos besos, eso si muy cerca de mi boca, y nos enseñó la casa.

Era una casa enorme, nos enseñó nuestra habitación, y nos dijo que la que estaba al lado era la de su hijo que el el que nos había abierto la puerta, y enfrente estaba la suya.

Nos dijo que nos cambiaramos para ir a la piscina a darnos un baño y que tenía preparado una barbacoa que nos esperaban abajo.

Entramos en la habitación y yo le dije a mi amigo que pensaba que íbamos a estar solos, el me dijo que no me preocupase que era gente muy simpática y que seguro que lo pasábamos bien los cuatro.

Empecé a pensar en lo que había pasado unos meses atrás, lo que mi amigo me había regalado por mi cumpleaños (relato de fantasías) y pensé que estas vacaciones iban a ser mas que playa y piscina.

Mientras pensaba sacaba mi bikini y vi que mi amigo me había metido en la maleta el bikini mas pequeño que tengo, la parte de abajo era un tanguita muy pequeño y la de arriba tapaba justo mis pezones y no había más que ese, así que me lo puse, la verdad es que no me importaba pues me había dado cuenta de cómo me miraba el dueño y a mi me encanta provocar a los hombres, me puse las sandalias y una batita transparente y bajamos a la piscina.

Cuando llegamos ya estaba el dueño bañándose, al rato llego su hijo con unos cócteles y nos los ofreció, al darme el mio bajo la cabeza y se quedo mirando mi diminuto bikini y se fue a la tumbona.

Nos metimos en la piscina y mi amigo empezó a hacerme aguadillas y a hacerme cosquillas, en una de estas me soltó la parte de arriba del bikini, yo no me di cuenta hasta que al salir del agua note como las tiras me rozaban en las piernas y al mirar para abajo vi que tenía todo el pecho fuera, me tape lo mas rapido que pude pero aun así tuvieron tiempo de sobra para ver mis pechos.

Cuando fuimos a la tumbona le dije a mi amigo que porque habia hecho eso y me dijo que le habían dicho que querían ver la mercancía, yo no le entendí y le pregunté qué mercancía, el me dijo luego te lo explico.

Comimos y nos fuimos a descansar, el dueño nos dijo que nos veríamos a la noche en la cena y nos sonrió.

Cuando estuvimos en la habitación mi amigo me dijo a que se refería con lo de la piscina.

El caso era que un dia hablando con el dueño de la casa le había comentado que su sobrino no había estado nunca con una mujer y varios hombres y que le había comentado que sería una de las cosas que tenía que hacer antes de marcharse, ya que vivía fuera de España, en un lugar donde las mujeres son más frías, y que quería buscar a una mujer que estuviera dispuesta a hacerlo, en ese momento mi amigo se acordó de mí porque sabía que no había cosa que mas me gustase, y se lo propuso.

Me dijo que había hecho un trato y que el nos dejaba pasar unos días en su casa si yo follaba con los tres, no me importo que lo hubiese hecho pues estaba deseando follar con varios hombres otra vez ya que desde que lo probé no podía resistirme a una propuesta así.

Teníamos que vestirnos para cenar, elegí un vestido negro cortito y bastante escotado, y unas sandalias negras de tiras muy finas y tacón muy alto, debajo del vestido no llevara nada.

Mi amigo me dijo que el chico no sabia nada de lo que el tio habia hablado con el , y que tendríamos que hacerlo de forma disimulada.

Bajamos a cenar y allí nos estaban esperando los dos, sentados en una gran mesa, el dueño me dijo que estaba muy sexy y me indico que me sentara entre el y mi amigo, tenía enfrente al chico que aunque no dejaba de mirarme lo intentaba disimular.

Mientras cenábamos mi amigo empezo a meter su mano debajo de mi vestido y a tocarme todo ya que como dije no llevaba nada más que el vestido, me estaba poniendo caliente así que yo tambien empeze a tocar la entrepierna del dueño de la casa, el chico nos estaba viendo pero no decía nada, mi amigo me dijo que el chico era fetichista de los zapatos así que yo puse mi pie encima de su polla sin quitarse la sandalia, el al notarlo se quedó mirándome pero no se apartó y yo seguí frotando mi pie con su entrepierna.

Al rato mi amigo metió su mano por mi escote y saco una teta y comenzó a chuparme el pezón, yo le saque la polla al dueño de la casa y empecé a masturbarle, mientras frotaba con mi pie la polla del chico que cada vez se iba poniendo más dura.

Yo seguía masturbando al dueño de la casa y el chico se había animado y saco su polla del pantalón y empezó a frotarla contra mi sandalia, la metia entre mi pie y la sandalia.

Viendo que el chico se animaba mi amigo me sentó en la mesa y dijo este es el postre, de inmediato el dueño de la casa puso su polla en mi boca, el chico empezó a besarme los pies siguiendo por la pierna y frotaba su polla con mis sandalias, yo cogí la polla de mi amigo con la mano y empecé a masturbarle.

Tenía el vestido bajado enseñando mis exuberantes pechos que eran manoseados por todos.

El chico se puso a chuparme mi coño siguiendo por mi culito, estaba muy húmeda pues tener tantos hombres para mi ya me ponía caliente, me pusieron a cuatro patas y me empezaron a chupar todo, estaba gozando y ellos también.

El chico se puso debajo de mi y yo me clave su polla hasta dentro, mientras el dueño de la casa metia su polla en mi culo, y mientras chupaba la polla de mi amigo, estaba reviviendo mis fantasías.

El chico no tardó en correrse y lo sustituyo mi amigo ya que yo quería seguir gozando. Cuando se recupero, que fue rápido, le dijo a su tio que queria follarme el culo que nunca lo habia hecho y el tio se apartó poniéndose cerca de mi boca para que se la chupara.

Cuando el chico me clavo su polla me hizo un poco de daño ya que la tenia mucho mas grande que la de su tio, pero enseguida mi culo se adapto a ella y comencé a gozar otra vez, cuando estaban a punto de correrse sacaron cada uno sus pollas de mis agujeros y se empezaron a masturbar delante de mí, sentí la leche caliente de todos ellos por todo mi cuerpo.

Aunque aquí no terminó la noche seguimos follando hasta que no pudimos más, el chico era el que más rápido se recuperaba y comenzaba a jugar con mis sandalias y su polla hasta que yo me la metia en la boca.

Fue una noche inolvidable seguramente la repitamos pues este verano vamos a ir a la casa de la playa y el chico vendrá por vacaciones, veremos lo que a aprendido.