Síguenos ahora en Telegram! y también en Twitter!

Una puñeta en honor a mi hermana

Una puñeta en honor a mi hermana

Hace como un año mas o menos me sucedió lo que les platicare a continuación, no entro en detalles para no hacer largo el relato.

Fue un domingo que teníamos un partido de futbol intercolegial yo juego en el equipo de mi grupo y mi hermana es porrista y todos los equipos viajamos a otra ciudad como a tres horas de aquí, antes de salir surgió un problema porque un autobús se lleno y había mas gente para el viaje pero no tanta para llenar otro autobús, así que decidieron subir a todos en uno solo.

Algunos chavos y chavas tenían que viajar en las piernas de otros por lo que la mayoría escogió irse con su novio o amigas etc.

Mi hermana como no tenia novio pidió irse conmigo supongo que no quería estar encima de algún desconocido o algo así y así hicimos el viaje.

De ida todo fue muy tranquilo la mayor parte del tiempo fui de pie cantando con mis amigos y echando porras al equipo, llegamos al partido el cual ganamos con muy buena ventaja y todos estábamos contentos por eso, pero se hizo tarde y teníamos que regresar a casa.

A eso de las 7:00 pm salimos de regreso ya estaba oscureciendo y nadie se cambio los uniformes yo traía mi camiseta y short y mi hermana su faldita de porrista, subimos al autobús y todos nos acomodamos unos con sus parejas y yo con mi hermana, al principio cantamos y gritamos porras pero poco a poco nos fuimos apagando, muchos se durmieron, otros empezaron a jugar con sus novias se oían besos y risas y como empezaba a oscurecer, el viaje se ponía de onda.

El autobús brincaba y mi hermana también, sentía como ella hacia presión con sus nalgas en mi verga quizá estaba incomoda y se movía de un lado a otro, mi verga se me empezó a parar, yo trataba de que esto no sucediera pero era imposible, a cada brinco se me paraba mas y mas además mi hermana parecía como si sintiera mi verga porque en cada movimiento su faldita subía y mi verga quedaba entre sus dos nalgas, nuestras piernas hacían contacto y eso hacia que me excitara mas y mas hasta que ya no pude y cuando tuve oportunidad jale mi calzón a un lado para que saliera mi verga de su prisión, mi hermana parecía estar dormida o no se daba cuenta de lo que pasaba debajo de ella pero mi verga ya estaba tocando sus piernas, de repente sentí como una mano me la agarraba, la muy putita empezó a frotar mi verga en su panochita, yo la agarre de la cintura tratando de jalarla mas hacia mi, sentía su calzoncito que ya estaba todo mojado y su manita me tocaba y me acariciaba hasta los huevos, ella también hizo su calzón a un lado para sentir mas mi verga, esto era una locura mi verga ya estaba entre los labios de su panocha toda húmeda por la calentura de los dos, pase una mano por abajo de su blusa le apreté su pezón que estaba bien duro, el autobús seguía brincando y en uno de esos saltos ella se metió mi verga a su cuevita, mmmmmmmhh, poco falto para que explotara ya no podía contenerme, a cada salto del autobús mi hermana se levantaba haciendo que mi verga saliera casi completamente para después caer otra vez encima de ella, así estuvimos no se cuanto tiempo, hasta que empecé a soltar chorros y chorros de semen dentro de mi hermana.

Al rato llegamos a casa y ninguno de los dos dijo nada, hasta la fecha nadie se a atrevido a hacer un comentario pero cuando yo me acuerdo no puedo dejar de hacerme una puñeta en honor a mi hermana.

¿Qué te ha parecido el relato?


Descubre más desde relatos.cam

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo