Sin embargo, se puede encontrar de todo: desde mensajeros, algunos desempleados hasta profesionales y personas que cuentan con un buen trabajo; eso sí, todos jóvenes que por lo general no sobre pasan los treinta años.
Pero bueno cuando todo esto acabo yo me fui para mi casa, no antes de decirle que si podía esa misma tarde me gustaría volver a quedar con ella si es que podía a lo que me dijo que por ella no había problema ninguno, y que estando a mi lado se encontraba muy a gusto.
Llegamos a la casa y después de ir corriendo al baño - mi necesidad más urgente en esos momentos - nos miramos sonriendo y por fin pudimos fundirnos en un ansiado abrazo y en mil besos que desataban nuestra pasión contenida desde hacia tiempo.
Cuando íbamos en el auto, nos sorprendió un poco, que el barrio por donde manejaba mi hermano, no fuese precisamente lo que llamaríamos de lo mejor, sino más bien uno de esos sitios por donde una evitar caminar.
Un chorro potente me inundó la garganta y tuve que tragar su semen, cosa que me repugna bastante. El segundo chorro me quedó en el paladar y el tercero y cuarto y quinto se me quedó entre los labios.
Yo no sabia que decir a lo que oía y Luis ni respiraba. Ella estaba muy a gusto y tranquila. Al sentarse puso la mano izquierda en mi pierna mientras con la derecha sostenía la copa que se había preparado.
Me excite mucho pensando en todo lo ocurrido y me fui de compras, como a mi me gusta, con mi minifalda, mis botas nuevas, unas medias de rejilla y nada mas debajo dejando mi coño mojado a la vista de cualquiera que me mirase por debajo de mi mini, cosa que no era difícil ya que la minifalda era bastante corta.
Me fui acercando lentamente. Ella se fue calmando, pero su vista bajó y notó el bulto de mi entrepierna. Pude ver su cambio de actitud, de asombrada a complacida, y decidí continuar adelante.
Dentro de los temas que tratábamos en nuestras loras, era de actualidad música y sobre todo cine, y esa fue la excusa para un día invitarle de mi parte al cine lo dije como jugando pero me acepto y sería la primera vez que salíamos después del trabajo.
Profundamente dormida no escuchaba nada, el día anterior mis tíos me invitaron a almorzar, había llegado de Europa donde terminó una beca de Administración en Barcelona mi primo Esteban
Este es el caso de Clara, cuando la vi que se tapaba la boca, se agachaba en el relato como escondiendo culpas por lo que ella sentía preste atención tratando de no dejar nada sin escribir sus vivencias, su frase clave ¿A ustedes no les pasó de sentirse con ganas de ir al sobre con un tipo de primera?
Atraje a Raulito con suavidad, con cuidado, no quería, pero con tantos ruegos y promesas de que no le dolería y que se sentía rico, fuí venciendo su resistencia y se puso de cuclillas encima de mi, poniendo el ojete del culo en la punta de mi verga, y comenzó a bajar con sumo cuidado...
Fue complicado ya que su agujerito ofrecía resistencia pero una vez dentro fue fácil iniciar el ritmo, su cara reflejaba una especie de dolor y placer, yo notaba una presión fuera de lo común en mi polla, pero es que su culo se cerraba entorno a mi polla, ya no pude aguantar mas y me corrí dentro de ella una sensación de placer recorrió todo mi cuerpo.
Con mi mano derecha tomé mi trocito de carne dormida, le bajé el prepucio con cuidado y comencé a acariciarlo con suavidad, mientras que los ojos de mis dos primos me miraban como platos desde la ventana.
Empezó con timidez y poco a poco, pero cuando empecé a gemir de gusto, comenzó a hacer los movimientos con su lengua más rápidos, me lamía, halaba, mordía, chupaba, lo que sentía era indescriptible.
En esa posición yo tenía la polla de Dick frente a mí, oscilando de arriba a bajo y totalmente dura y maravillosa. Así que mientras Harry me preparaba por detrás, yo empecé a entretener a Dick por delante, lo que a él le encantó, claro.
Se temía lo peor, y preguntó quién era y ese personaje le respondió que era un sorpresa y que abra enseguida. Juan obedeció llevado por esa voz de ángel que acababa de oír; se encontró con "una chica diez", la chica y la situación que todos los jóvenes pajilleros habían deseado y seguirán deseando.
Me viro boca abajo y comenzó a acariciar la espalda, me daba mordiscos y me pasaba la lengua a la vez que me acariciaba la pinga. Iba bajando la espalda y me llego al culo, le comenzó a pasar la lengua.
Poco a poco fue aumentando el ritmo, cada vez su polla entraba y salía de mi ano con más velocidad, a la vez el se movía de modo más agresivo, sacando su verga casi por completo de mi agujero y empujándola dentro con fuertes empellones.
Después de estas palabras abrió la boca y empezó a tragársela, cuando no pudo mas cerro sus labios sobre mi trozo de carne y comenzó a mamármela como nunca nadie lo ha hecho.
Llegó a la cafetería y me encuentro con Rosa, ha ido al peluquero, se ha puesto guapa, charlamos cálidamente, me cuenta sus intimidades, la escasez de relaciones sexuales y la poca calidad de las mismas, cada vez está más zalamera y coqueta, parece una mutación, la resignada ama de casa desahogandose con un desconocido, pero el desahogo no había hecho más que comenzar.
Aunque no lo he comentado hasta ahora, Sonia es una mujer espectacular, tiene unos pechos perfectos y grandes pero no exagerados, un vientre duro como la tabla de una mesa y un culo de chica de desplegable de Playboy.
Mientras me acomodaba ya que ella se había sentado ella se bajo el brassier y pude ver sus enormes tetas de verdad, eran inmensas para su edad, y con todo gusto se la chupe mi primo a todo esto ni siquiera miró.
Dicho esto salió de la habitación dando un portazo, así que el angelito porfin había sacado las uñas, me levanté del suelo y me dirigí al baño me vi en el espejo y revise el corte que tenía en el labio inferior pero no solo mi cuerpo estaba roto sino también mi corazón.
Se nos unió en la charla, la pasamos bien hasta que llegó el momento de irnos a dormir, por costumbre me baño antes de ir a dormir, pero como no sabía cómo emplear el nuevo baño llamé a Diego pero Luisa me escuchó y fue quien me atendió, apareció portando una bata rosada delgada sus pezones se sobresaltaban, una abertura a la altura del abdomen mostraba un abdomen trabajado, plano y firme, al parecer le gustaba mantenerse.
Un dia fui llevada a una peluqueria, alli me depilaron por completo, coño, axilas, cejas y por último y lo más doloroso y vergonzoso para mi, mi cabellera, mi hermosa melena rubia a la que tantas horas y tantos piropos habían dedicado, una lágrima cayo por mis mejillas.
Estoy en la etapa más feliz de mi existencia, y me siento una diosa llevando a mi hijo a la hermosura del amor, del sexo y del placer, ambos nos sentimos lujuriosamente felices, como jamás lo habíamos experimentado. Siento que me acaricia no solo físicamente sino también con su mirada y hasta con su sonrisa...
Ahora me toca mirar a mi y tu te dejaras hacer lo que yo quiera, quieras o no quieras estas a mi merced, eso me estaba poniendo de los nervios no sabia que hacer, y para colmo de pronto pude observar como con las otras esposas hacía lo mismo con mis piernas, desde luego ya no podía hacer nada, ya que estaba indefenso y ella podría hacer lo que quisiera conmigo.
Se quitó el sujetador para permitirme libertad de movimientos sobre sus pechos se los chupe los dos con deleite, despacito disfrutando de ellos como de dos frutas maduras, comencé mi descenso hacia su cueva del placer, baje por su tripita bronceada, y empecé a besarla las braguitas de su bikini
Mi esposa gritaba de placer rogándole a Larry que se lo meta, "Métemelo Larry, por favor métemelo" Mientras Larry, con la ayuda de Irma, empujaba su inmensa verga, mi esposa colocó una pierna hacia atrás sobre las piernas de Larry y con su mano ayudaba a empujar su cadera contra ella.
Se dio la vuelta y allí estaba él, le pareció un hombre atractivo, sobre todo muy elegante, con mucha clase, no era joven, por lo menos 40 años, se conservaba bien, delgado y fibroso, se notaba en sus manos, surcadas de venas, con dedos largos, acabados en uñas grandes, bien formadas y bien recortadas, perfectamente limpias, fue lo primero que le atrajo de él, sus manos.
Uno de los mayores placeres que se puedan tener en la vida, es descubrir la intimidad de una mujer hermosa, ser un verdadero voyeur, y adentrarse hasta en los secretos más protegidos.