El tiempo, ese implacable cincel, había esculpido a Lupita. Ya no era la niña frágil que dominé en el sótano de Colima. A sus 33 años, poseía una madurez que irradiaba sensualidad, una belleza curvada por la vida que palpitaba con una fuerza propia.
La naturaleza humana al máximo; una chica que empieza a despertar sexualmente y todas las vivencias que encaminaron mis pasos hasta mi primer relación sexual con una persona muy especial.
Mi pasión es el futbol y en especial mi equipo san Antonio, desde que era chico lo sigo siempre, pero hace 5 años conocí a mi otra pasión. Mi novia Pili que también es una apasionada del futbol, pero en este caso es hincha del clásico rival estudiantes.
Días en el Paraíso. Por fin estábamos completamente solos, en un hotel y apenas habíamos pasado la primera de nuestras 3 noches. Resulta que mi hermanita tiene una imaginación muy activa.
No me dio tiempo a responder: se acercó y me besó con una intensidad que me encendió de golpe. La pegué contra la nevera, mis manos recorriendo cada curva, y sus gemidos se mezclaban con mis besos desesperados.
Mi padre era un hombre cariñoso y adinerado. Y mi madre una mujer hermosísima y bastante frívola, hacia que mi padre gastará y gastará sin saber que eso nos costaría demasiado...
Un joven sale a beber con su madre, mujer madura irresistible; en el bar, la invita a soltarse con otros hombres. Ella termina exhibiéndose sin pudor en la mesa, encendiendo a todos con su descarada entrega
La giré, me puse de rodillas y envolví su clítoris con mi boca. El agua de la ducha y la que caía en cascada de su cuerpo corrieron sobre mi cabeza. Sus manos volaron a mi cabeza y me empujaron contra ella gimiendo. Le di golpecitos y chupé el clítoris hasta que sus piernas temblaron y ella gritó.
Elise jadeó y se estremeció al alcanzar el orgasmo. Su coño se convirtió en un torno. Todo su cuerpo se puso rígido y gritó. Más semen salió disparado de mí para inundarla. Me desplomé sobre ella con el corazón latiéndome con fuerza por la fuerza del orgasmo.
Sin pensarlo mucho, Gerry se colocó entre mis piernas y con su verga en la mano se dirigió a metérmela de un solo empujón hasta el fondo, de lo lubricada que estaba me supo a gloria, ya necesitaba sentirme ocupada y sus siguientes movimientos fueron fuertes, profundos, rápidos, los labios de ....
De todo lo que me pasó con una chica que conocí en Forum. Cómo un chico de 25 años conoció a una chica de 18 sumisa en un forum de incesto y zoo un encuentro fogoso y como la chica relata la experiencia que tuvo para llegar a ser quien es.
Un día cualquiera con ganas de experimentar algo nuevo, una alta, sonrisa agradable y un gran trasero que solo de verla se paraba mi miembro. una historia fantastica